Wednesday, December 27, 2006

Café para uno

Un poco de mí...

El café de siempre, hoy me pregunté si esto es debido a que en verdad me gusta o sólo es porque es el más cercano a casa, conociendo mi capacidad de saborear y valorar los cafés y poniendo esta capacidad en la balanza con mi flojera, me inclino por la segunda opción.

En fin, no importa, estoy aquí café Veracruz, americano grande, Delicados veinticuatro con filtro, libro no tan profundo y dos meseras que intentan convencerme de que pida algo más. Me gustaría encontrarme con algún mesero(a) que tenga los cojones de decirme: “pide algo más o lárgate, mira el vaso es desechable ¡llévatelo!, no nos sale tenerte ahí aplastado”, ante lo cual sólo me tiraría a reír como loco y felicitarlo, tal vez me iría o tal vez llamaría al manager, depende mi estado de ánimo.

He estado pensando mucho en Bukowski, ayer leí un “poema” de este bohemio (qué bonito suena bohemio comparado con; borracho empedernido, cojeputas, prejuicioso y bizarro), creo que se llama “Cálidas Nalgas” o algo así dicho poema y lo escribió en un viaje que hizo a Veracruz.

Y más allá del poema pienso; -hasta este hijo de puta se preocupó por viajar de repente, se hartó de su departamento en el cuarto piso de un edificio, desde cuya ventana veía pasar la vida-, (literal y metafóricamente).

Llevo meses pensando en un viaje, uno de verdad, más allá de los que el alcohol, hierba o una buena compañía me proporcionan en un día con suerte, y no sé supongo lo haré en un mes.

Volviendo al poema de Bukowski, el poema o reflexión gira entorno a las nalgas de las mujeres veracruzanas en un día de carnaval (feliz), también habla de los ojos de estas mujeres, en fin concluye que son insatisfechas. Lo concluye con un simple vistazo a sus nalgas y sus ojos.

Y de algo tan bizarro (muy estilo Bukowski, que no me molesta al contrario lo leo y disfruto mucho), me salta a la mente el tema de la percepción de las cosas, echo un vistazo alrededor y veo mil cosas pero percibo cinco mil y no sé a quién diablos le importe o si los demás lo ven, no creo tener la capacidad de “ver entre líneas” más elevada que todos, supongo que todos notamos lo que pasa a nuestro alrededor pero yo insisto en hacer mucho lío al respecto, antes como a los dieciséis años, o igual un poco antes, me molestaba demasiado lo que veía, todo me parecía estúpido, ostentoso, pretencioso, estéril e inverosímil (gracias pinche Nietzsche y Schopenhauer), supongo he aprendido a lidiar con la gente y las cosas.

Tengo confusas teorías del ocio y la vida (paso del tiempo), en ocasiones me enferma la gente que no piensa en ello (creo que del valioso ocio construyes tu vida se supone es el tiempo donde haces lo que se te antoja y no te obligan). Pondré un ejemplo de mi disfunción social: En el transcurso de este estúpido escrito, una pareja permanece recargada en una fuente, no sé cuántos cientos de besos se han dado y cuántas ocasiones el “caballero” ha intentado deslizar su extremidad superior derecha un poco más abajo del talle de la “dama”. Es decir, el muchacho duda mil veces agarrarle el culo a su novia o lo que sea de él, no sé si llegará frustrado a casa, no sé si será ella la que llegará frustrada ante la indecisión de su acompañante por acariciarla. En fin, bendito ocio al menos aprovechémoslo al máximo (sin importar qué actividad por bizarra que sea emprendamos) .

Al frente de mí un grupo de amigos no hace más que hablar del pasado y reír al respecto y si mi instinto de percepción, temerario como el de Bukowski, no falla, me parecen un tanto frustrados y aburridos. (Ya sé tengo pedos).

Y entonces me avergüenzo de mis pensamiento y divago ¿qué carajos necesito para que valga la pena algo para mí?. Sé que lo que hago aquí sentado solo, es igual o más inútil que lo que ellos hacen, sé que soy pesimista, y no logro despojarme de esta arrogante sensación de superioridad de conciencia.

Conciencia de que el tiempo se va, de que si pretendo algo no hay como hacerlo o decirlo sin rodeos, que no debo atenuar mi intención, ni debo esconder mi vacío, quizá así algún día alguien o algo al notarlo canalice mis ideas o simplemente algún día me inunde el optimismo y hasta disfrute la fugacidad de las palabras y sea más amena mi espera de la muerte (digo vida).

Me asalta la idea de la productividad de mis actos, ¡maldito pasado de economista!, es pretencioso querer trascender por algún logro en la vida (creo que por eso hay tantos embarazos, un hijo es la salida más fácil para dejar tu legado en el mundo), claro que tampoco puedes vivir por vivir y a ver qué chingados te regala el futuro, o destino, o suerte o Dios o lo que sea.

Pero tampoco quiero perseguir la intangibilidad, ni seguir al viento, ni confiar en la existencia de un futuro mejor (ando buscando un balance).

Positivamente pensaré en un sueño u objetivo en la vida ...mmm... cualquiera que salta a mi mente es medio material y el dinero y yo somos polos iguales, siempre procura abandonarme en los momentos menos indicados, así es que por ello no cuento con él cuando emprendo una actividad, creo que si no tuviera que alimentarme no gastaría más que en café, cigarros y cerveza e incluso mi mísero sueldo sería más que suficiente.

Ya establecido que mis “sueños” no son materiales, me queda concentrarme en logros de estado de ánimo, conciencia, “intelectualidad” y en alimentar mi ego y soberbia (o la humildad en una de esas). Esto en lo que respecta a mi persona.

Con respecto a la gente que me rodea me agrada establecer puentes firmes, lo que desgastadamente se llama amistad hoy en día (no pongo entre comillas amistad ya que es una palabra que respeto y en la que aún creo ciegamente).

El legado de mi existencia depende de ti que lees esto, de ti que te abrazo, de ti que hago que sonrías, de ti que te digo salud, de ti con quien comparto el cigarro, de ti que me regalas minutos de tu vida, de ti que me diste a luz, de ti que eres mi consanguíneo, de ti que me escuchas y de ti que te olvidas del mundo cuando estamos juntos (y si tú no agarras la ondita pues no puedo hacer nada al respecto).

¡¡Y ya estás!!, no quiero nada más, quiero escribir, quiero ser honesto, quiero tener resaca, quiero reírme de la estupidez en su cara, quiero estar en paz con la vida, quiero ver películas abrazando a quien desea abrazarme, quiero aprender a disfrutarme, quiero bailar torpemente, quiero desnudarme y ser libre, quiero escuchar a Calamaro, Bunbury, Páez, Fabulosos, Cerati, Drexler, Jarabe de Palo, Caifanes y Pearl Jam todo el día.

Procuro no meterme con nadie, pero me fascina la ironía, el sarcasmo y el humor negro, la burla y la humillación (honesta y merecida) y de ocasión sin ser malvado (aunque no se puede a veces, además son un arte). Quisiera reír un poco más y a veces actuar más, sobretodo cuando no tengo mucho por decir.

Se acabó la hoja y me da hueva sacar otra, esta tarde me gustó mucho, no sé si estoy triste o feliz pero no he dañado a nadie, nadie me extraña y no quiero nada, hoy es sólo un día más. Creo que este escrito gira entorno a lo que viví y sentí ayer y por las fechas de renovación de año nuevo, pásenla bien y disfruten en cuanto puedan de todo lo que valoren.

Pásenla bonito Emme, Rackha, Sergio, Mina, Alex, Kali, Beto, Tannia, Paco, Conta, Uriel, Yas, Nani, Gemo, Memo, los quiero de a madres son a los que más frecuento o traigo a mi mente casi siempre, ignoro quién lo lea, al que lo haga y no mencione le mando buenas vibras.


AndracA

Monday, December 25, 2006

Desvanece


Esperando en el mismo café de nuestras mocedades,
tengo curiosidad de ver tus ojos de nuevo,
estoy ansioso de hablar con vos de los tiempos que ya nunca vendrán,
aún mantienes la costumbre de la impuntualidad,
no es de extrañar, la vida pasó siempre tan rápido a tu lado.

Por fin arribas, esta vez no me estremezco ante tu mirada,
vistes de ausencia, tacones del tiempo,
empañas de sufrimiento todo el lugar al andar,
tu rostro con las huellas de un largo caminar del dolor,
nos saludamos, y un silencio, epitafio del pasado, nos desconcierta.

Pides lo de siempre, café frío en potencia,
nuevas teorías del tiempo, la vida, el amor y la soledad,
fluyen de tu memoria de largos andares en forma de palabras,
tu cansancio de vida es notorio, el tiempo pudo más que aquel
jovial sentimiento de aventura que jurabas eterno.

Tres o cuatro preguntas cliché, pretenden hacernos creer
que hay otro tema del cual hablar sobre nuestro pasado que no sea
ese tiempo donde me amaste sin saber amar,
de enseñanzas de tus noches y milagros de tu cuerpo,
de ese amor equilibrista en la cuerda de un presagio.

Hoy podemos hablar frívolamente del amor,
lo sé al no encontrar un vestigio de melancolía
en tus ahora misántropos ojos, hace varios ceniceros
que intentas preguntarme algo, pero no dejo que lo hagas,
he dejado atrás esa manía de estar pensando siempre en el ayer.

No quiero hablar de el tiempo que es una ilusión que no vuelve,
no quiero que naufraguemos en los mares nostálgicos de la memoria,
no quiero que interrumpas mi abandono, ni que rondes mi silencio,
sólo recuerda que al final todo termina por pasar
y el destino también sabe traicionar.

Ya en las horas resignadas de la vida,
la verdad es lo de menos, atesora el pasado en el cofre del olvido,
enjuga esos ojos que lloran sin dolor,
refugia tus nostalgias en el ritmo de mil boleros,
apaga esa sed de dolor de tus destinos de amor,
y esa fe ... la fe no basta esta vez.
AndracA

Monday, December 18, 2006

Del olvido y otros placeres


Y te extraño a mi extraña manera
este tiempo solo, convirtió al amor en necesidad,
tengo miedo pues no siento nostalgia al recordarte,
sin embargo, el pensar en ti enciende las ansias
que en la soledad ahogo en el mar de una seductora botella
y destierro en el humo de cigarrillos interminables.

Mis manos repudian cubrir tu piel de olvido,
mis ojos reclaman su lugar en tu mundo,
aún escucho el espejismo de tus verdades,
tus amargos besos mueren dulcemente en mis labios,
y el aroma de tu esencia inunda mi destino.

Y te olvido a mi manera, recordándote a diario,
desgastando tu imagen inerte en mi indiferencia,
abrazando al vacío de mi libertad, escondiéndome del futuro,
con la tenue duda de si alguna vez algo fue cierto.

¿Será suficiente el ser insensible para olvidarte?
tristezas placenteras me traen tus recuerdos,
evocación del pasado tormentoso, simulacro del amor,
féretro de la confianza, quimera de la eternidad,
la melancolía no es más que el silogismo del presente.

Y el olvido no es más que el recuerdo intangible.
AndracA

Saturday, December 16, 2006

Calibre 22


Poema 97

Fueron esos días frenéticos,
donde encontraba la eternidad en un instante,
envuelto entre las noches de tu cuerpo,
miradas y palabras de tu misterio,
fumamos el cigarrillo de la satisfacción y la nostalgia,
inhalando los horizontes del mundo,
entre cervezas, prisas y desenfrenados besos.

Caminamos por los callejones incendiados,
confundidos con las sombras y otras formas
y fue la mística del cosmos eco de la soledad abandonada
el soundtrack de la película de nuestra vida.

Prendimos de blues todos los rincones,
renunciamos a todo lo que nos frikeaba,
quisimos subir el switch de nuestros rojos corazones
y representamos la agonía con máscaras, lágrimas y risas.

Hablamos de cómo sería el rostro del mañana
mientras te veía desaparecer ante mis ojos,
ángel de humo, miro de lejos el buque
y una niebla de tristezas azules me asalta,
duele dejarte libre, pero sé que nunca me seguirás.

Recorrimos el asfalto, proclamamos la muerte,
odiamos a los que acumulaban el tiempo en dinero y vejez,
no fijamos límites ni razones; evolución era nuestra sangre,
vivíamos sin autorización.

Sedujimos legiones de ángeles y demonios,
cercamos astros y mares y su desesperación
y desde nuestra guarida eólica vivíamos capítulos épicos de la historia y el amor.

Hasta que el mal humor nos sorprendió y todo acabó
y ahora otra vez, débil y enfermo,
cercano a nadie, con la luz de la lámpara suspendida
y los rumores en un vaso de vodka ... no esperaba todo esto.

Es un día intoxicante, ¿son las nueve o las once?, ¿aspirinas o anfetaminas?
nuestros días ya han pasado, mis días de fondo rosa terminaron,
no me preguntes cómo, no me preguntes por qué.

Adiós desenfadado amor, con vestidos de mar,
la ciudad nos verá partir y la luna quizá jamás nos vuelva a guiñar,
no lo sé, sólo te digo adiós, sólo te digo adiós y besos desde casa.
Besos, noche, lluvia, velas, sueños, aire y nada más

Au revoir...

Gustavo Reyes Vázquez (Bang!)

Saturday, December 09, 2006

Pretensiones


Dime algo cierto, algo con agallas, algo real algo más que:
hippies en frac, filósofos confundidos, economistas pobres,
escritores mancos, videntes invidentes, suicidas vivos,
fantasmas temerosos, leones de zoológico, camellos sedientos,
Julietas infieles, Venus de Milo abrazando a la soledad,
barrocos simplones, sedientos sin labios,
reyes que matan a sus hijos para no ser destronados,
Anaxágoras estudiando astronomía, manecillas del reloj que dudan,
eternidad en coma, amor eterno, rutinas intrigantes,
espejos embusteros, sombras con libre albedrío,
recuerdos del futuro, el edén de flores marchitas,
capitalistas sentimentales, cenicientas racistas,
bohemios felices, beatos blasfemos, lunas radiantes,
orgasmos eternos, verdugos misericordiosos.

Admiro este raro paisaje de muchedumbre
y un mundo feliz de palabras falsas y oídos crédulos.

AndracA

Thursday, December 07, 2006

Quizá no es amor


Cenizas de un amor fugaz que murió lentamente,
que humanizó el dolor, dulcificó besos torpes y abrazó caricias frías
y toda esa literatura barata que surgió de él, es hoy el epitafio del mismo.

Casi no hay nada qué recordar y sin embargo
el balbuceo del pasado me aturde en esta tranquila y oscura noche,
atesoro las reliquias invaluables de eso que llamaste amor eterno alguna vez,
insisto en culpar al tiempo de lo que mis manos destruyeron.

Hoy no queda nada qué besar,
hoy duermes en mundos lejanos con cadenas de espinas,
hoy tu sombra me visita de nuevo, ¿o será que sigues aquí?
no quiero parpadear, hagamos de este un momento interminable.

Fumo el aliento que emanas y se confunde con mi alma,
ahogamos el pasado en un mar de caricias,
atas mi cuello con una cuerda de besos,
¡el mundo suena tan bien en tus labios!
eres el espacio donde habitan mis sueños y pesadillas,
me hundo en ti sin temor, ¡no me rescates!, mañana...mañana no importa
¿amor?, ¿pasión?, no me digas nada nunca más.

Y siempre dejo que te vayas una y otra vez.

AndracA

Sunday, December 03, 2006

Tomo un paseo


Las cuatro paredes comienzan a comprimirse
hogar dulce hogar es algo que simplemente no tiene sentido ahora
algo me arroja a la calle; ¿la soledad?, ¿la ansiedad?, ¿la curiosidad?,
¿la cajetilla vacía?, ¿el whisky faltante?, no lo sé,
rompo mi último escrito, tomo el saco y la ruta de siempre.

Estas calles que recorro a diario no me lucen familiares,
todos los rostros son nuevos para mí, creo que todos tienen prisa.
Observo las casas a detalle algunas me parecen interesantes,
las olvido de inmediato al caer en un estúpido charco,
de nuevo me concentro en llegar al centro, quizá algo me espera ahí.

No sé a qué hora llovió, ni siquiera sé que día u hora es,
los fieles arremonilados en busca de perdón en la catedral
me hacen suponer que es domingo, jamás me gustaron los portales,
sin embargo intenté disfrutarlos al lado de cientos de extraños que parecen deleitados en demasía.

Por qué mi tarde ideal no es de portales, globos, payasos de maquillaje grotesco
y novios besándose como si alguno de ellos partiera a un viaje muy largo o como si fuera el último beso de sus vidas, ¿palomitas de dulce o saladas?, debería ser mi decisión más difícil en un día nublado como hoy, pero insisto en hacerlo más difícil.

Mi tiempo libre solía ser simple, creo que ahora sólo es tiempo, ya no soy libre.

Vuelvo a casa fumo tres cigarros en línea
y escribo lo más sensato de las diez cuartillas pasadas;
te extraño, seguido de las ocho letras que forman tu nombre.

AndracA

Saturday, December 02, 2006

Ráfagas


Reencarnación moderna del erotismo,
tomaste tu lugar en mí como el silencio que oprime a las almas,
mis manos fueron la guarida favorita de tu soledad,
hoy sólo queda la memoria de carne y este orgullo inverosímil.

Sui géneris y curiosa aproximación del amor fue lo nuestro,
tan resplandeciente como el preludio de la muerte,
fusión de coincidencias de solitarios,
con corazones llenos de recuerdos como el mar de naufragios.

Y fuimos recuerdos tangibles, hoy olvidados el uno del otro,
llenamos el viento de palabras incomprensibles y que se estrellaban en la nada.
De nube en nube, de noche en noche, de estrella en estrella
de boca en boca y de cama en cama intento relegarte.

Y podría encontrar de nuevo tus labios que son dos rosas,
y en ellos caminar sin rumbo, lentos como el olvido,
arrastrando nostalgias o que ellas nos arrastren a nosotros,
conquistando mundos oscuros donde se esconden los destinos.

Habitando en el tiempo donde de un beso a otro se nace y se muere,
parodiando a la eternidad y donde la muerte se confunde con el olvido,
donde los fantasmas del amor cuidan tus lágrimas como algo sagrado
y donde entre tus ojos y mis labios habita el dolor.

Y sigo mirando esa ventana hipnotizado por las estrellas,
en espera de ese temblor que quizá jamás volverá.

AndracA