Desvanece
Esperando en el mismo café de nuestras mocedades,
tengo curiosidad de ver tus ojos de nuevo,
estoy ansioso de hablar con vos de los tiempos que ya nunca vendrán,
aún mantienes la costumbre de la impuntualidad,
no es de extrañar, la vida pasó siempre tan rápido a tu lado.
Por fin arribas, esta vez no me estremezco ante tu mirada,
vistes de ausencia, tacones del tiempo,
empañas de sufrimiento todo el lugar al andar,
tu rostro con las huellas de un largo caminar del dolor,
nos saludamos, y un silencio, epitafio del pasado, nos desconcierta.
Pides lo de siempre, café frío en potencia,
nuevas teorías del tiempo, la vida, el amor y la soledad,
fluyen de tu memoria de largos andares en forma de palabras,
tu cansancio de vida es notorio, el tiempo pudo más que aquel
jovial sentimiento de aventura que jurabas eterno.
Tres o cuatro preguntas cliché, pretenden hacernos creer
que hay otro tema del cual hablar sobre nuestro pasado que no sea
ese tiempo donde me amaste sin saber amar,
de enseñanzas de tus noches y milagros de tu cuerpo,
de ese amor equilibrista en la cuerda de un presagio.
Hoy podemos hablar frívolamente del amor,
lo sé al no encontrar un vestigio de melancolía
en tus ahora misántropos ojos, hace varios ceniceros
que intentas preguntarme algo, pero no dejo que lo hagas,
he dejado atrás esa manía de estar pensando siempre en el ayer.
No quiero hablar de el tiempo que es una ilusión que no vuelve,
no quiero que naufraguemos en los mares nostálgicos de la memoria,
no quiero que interrumpas mi abandono, ni que rondes mi silencio,
sólo recuerda que al final todo termina por pasar
y el destino también sabe traicionar.
Ya en las horas resignadas de la vida,
la verdad es lo de menos, atesora el pasado en el cofre del olvido,
enjuga esos ojos que lloran sin dolor,
refugia tus nostalgias en el ritmo de mil boleros,
apaga esa sed de dolor de tus destinos de amor,
tengo curiosidad de ver tus ojos de nuevo,
estoy ansioso de hablar con vos de los tiempos que ya nunca vendrán,
aún mantienes la costumbre de la impuntualidad,
no es de extrañar, la vida pasó siempre tan rápido a tu lado.
Por fin arribas, esta vez no me estremezco ante tu mirada,
vistes de ausencia, tacones del tiempo,
empañas de sufrimiento todo el lugar al andar,
tu rostro con las huellas de un largo caminar del dolor,
nos saludamos, y un silencio, epitafio del pasado, nos desconcierta.
Pides lo de siempre, café frío en potencia,
nuevas teorías del tiempo, la vida, el amor y la soledad,
fluyen de tu memoria de largos andares en forma de palabras,
tu cansancio de vida es notorio, el tiempo pudo más que aquel
jovial sentimiento de aventura que jurabas eterno.
Tres o cuatro preguntas cliché, pretenden hacernos creer
que hay otro tema del cual hablar sobre nuestro pasado que no sea
ese tiempo donde me amaste sin saber amar,
de enseñanzas de tus noches y milagros de tu cuerpo,
de ese amor equilibrista en la cuerda de un presagio.
Hoy podemos hablar frívolamente del amor,
lo sé al no encontrar un vestigio de melancolía
en tus ahora misántropos ojos, hace varios ceniceros
que intentas preguntarme algo, pero no dejo que lo hagas,
he dejado atrás esa manía de estar pensando siempre en el ayer.
No quiero hablar de el tiempo que es una ilusión que no vuelve,
no quiero que naufraguemos en los mares nostálgicos de la memoria,
no quiero que interrumpas mi abandono, ni que rondes mi silencio,
sólo recuerda que al final todo termina por pasar
y el destino también sabe traicionar.
Ya en las horas resignadas de la vida,
la verdad es lo de menos, atesora el pasado en el cofre del olvido,
enjuga esos ojos que lloran sin dolor,
refugia tus nostalgias en el ritmo de mil boleros,
apaga esa sed de dolor de tus destinos de amor,
y esa fe ... la fe no basta esta vez.
AndracA
2 Comments:
sssss... a veces pienso.... ojalá pudiese el humor negro llevarse todo el velo de lo que fué. Ojalá una buena compañía, reflexiones, proyectos, en fin... ojalá todo esto bastara para despojarse de la metáfora del pasado irresuelto.
Pero.... me quedaré con las ganas de resolver el enredo más crudo y necesario de la humanidad que ahora se materializa (tansiquiera en este post).... ahhhh.... hasta hace un tiempo terminé odiando todo lo que tuviese que ver con mis recuerdos pasados, la agonía de respirar el aroma en la mañana en su ausencia, mi vida colmada en su compañía....
Pero.... la verdad fué necesario que una parte de mí mueriera tan desoladamente, inconsolable, arrepentida, agonizante.... en fin....
Todos somos recuerdos en potencia.... sazzz!!!.... esa es tu frase..... pero.... a mi me gusta coserle un pedazo mas: "todos somos recuerdos en potencia, incluso para nosotros mismos".... yo extraño a un sergio de hace 13 años.... el cual pos ya no existe... nisiquiera podemos tenernos a nosotros mismos....
m gustó el post.... chida forma de escribir!
atte. metronomo
Dicen que recordar es vivir y creo que esto gira en torno a la manera en que recuerdes las cosas, la melancolía es un poderoso atenuante de la frustración.
También dicen que del pasado se aprende, y debe ser un arte transformar y acomodar de manera precisa los recuerdos para condensarlos en algo llamado sabiduría.
Coincido, hay parte del pasado que necesita morir lenta y cruelmente, "el pasado está condenado a la muerte y es masoquista".
Saludos metrónomo un abrazo.
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