Ahí vamos - Gustavo Cerati

Un disco de Gustavo A. Cerati es sin duda un acontecimiento muy relevante para quien se jacte de ser su fan, esperas una nueva joya que atesorarás en tu cofre de memoria auditiva, potenciales nuevas rolas para la banda sonora de tu vida, próximas charlas de café, ¡cervezas y cigarros por favor, que escucho a Cerati!, no es sólo un disco es un momento, y vivencias que rodean este acontecimiento musical, igual exagero si no te late Cerati seguro lo leerás así, pero si te late, tú y yo sabemos qué pedo. Y bueno, el disco salió hace ya un rato pero ahí va la reseñita...

Al fin sucede

Desde el primer momento del disco las guitarras sobresalen, como lo harán durante todo el disco, y así a guitarrazos Cerati te manda varias frases que parecieran sin algo que las una, Cerati siempre te da la libertad de entender lo que quieras y sus frases son puertas abiertas, son luz tenue que insinúa, la rola es sobria, acordes armónicos, no hay solos, algunas distorsiones una bataca que nunca explota, pero sirve de perfecta introducción al disco.

La excepción

Con guitarras fuertes y un bajeo con mucha actitud, empieza esta rola que es una petición al prójimo o prójima para que nos vuele la cabeza, para vivir algo nuevo, que el amor sea el transporte a otras realidades en un viaje sólo de ida y sin ataduras. La rola tiende a la libertad, no sólo la letra sino la música que es constante y sube, la batería lleva al climax en un coro acompañado de distorsiones y un broche con la frase “ya rompí las reglas”.

Uno entre mil

La constante bataca y un bajeo de lujo, acompañan la primera estrofa de la rola que nos narra la presencia impávida de una fémina que en estado de reposo es una explosión en potencia, en la segunda estrofa entra la guitarra con un acorde a la vieja escuela tendiente al metal de antaño, que llena de estilo a la canción, para desembocar en uno de los mejores coros del disco, “cuando lo crea oportuno, abrir un hueco en el futuro, fundir mi sueño con el tuyo y que por fin seamos uno entre mil”, un solo y de nuevo al coro que no te cansarás de cantar.

Caravana

Es la rola más rápida hasta lo que llevamos del disco, una rola sobre el flirteo al principio con una nena que al parecer lleva las riendas, las guitarras son constantes y con pocos acordes, después Cerati nos manda el coro más rápido y fuerte del disco “hay que cerrar los ojos para poder ver, el diablo no es más que un ángel con ansias de poder”, con pujantes y distorsionadas guitarras de fondo, que hacen que la rola termine hasta arriba.

Adiós

Hacía un rato que no escuchaba una canción que hablara de cómo superar la dura etapa del desamor o ruptura y que no me diera hueva o me pareciera cursi y estúpida, la rola es muy tranquila y positiva no sólo en la letra, la interpretación de Cerati dibuja un buen porvenir en el ambiente o qué sé yo, es una rolota pero le doy más crédito a la voz que a la música, la letra es buena y la música se acopla a la intensidad de ésta, guitarras puras, honestas, con acordes armónicos conllevan a una rola muy amigable y hasta te imaginas un final feliz en tu cabeza.

Me quedo aquí

De todo se aprende, hay cosas que no puedes cambiar, a veces es mejor quedarse quieto, seamos sensatos, todo esto te arroja esta rola a tu cabeza, es la rola mejor ensamblada, para mí, musicalmente es muy armónica, guitarra acústica, eléctrica, bajo y batería, y la voz de Cerati entonando un himno a jugársela y morirse con sus ideas y sus presentimientos, concientes de las consecuencias y aceptándolas de antemano, casi al final con un ritmo de aplausos y coros suaves la rola suena tremendamente esperanzadora, es una rola para madurar y a la vez jamás dejar de ser ingenuo.

Lago en el cielo

Unas guitarras the curescas o algo por el estilo son el inicio de quizá la mejor canción del disco (para muchos), es una rola de redención del amor, del “sacrificio” de amar a alguien con todos sus defectos que nos duelen, es complementarse el uno al otro, es olvidar el pasado a diario, es encontrar algo tan imposible como un lago en el cielo, la rola es muy constante y la intensidad de la letra con elegantes acordes de guitarra de fondo invariablemente te harán regresar el disco y escucharla de nuevo inmediatamente, al final el coro hace más emotiva la canción que desvanece poco a poco, dejándote en el éxtasis y aún tarareando “sos el paisaje más soñado y sacudiste las más sólidas tristezas y respondiste cada vez que te he llamado, vamos despacio para encontrarnos, el tiempo es arena en mis manos, un lago en el cielo es mi regalo para olvidar lo que hiciste”. Un clásico ya de Cerati que te impacta cuando la escuchas en vivo.

Dios nos libre

Otra rola rápida que contiene el coro más sugestivo del disco y el que más me gusta, es una propuesta indecorosa que suena bastante bien, la guitarra líder es vertiginosa con acordes constantes de la guitarra armónica, culminadas en un solo distorsionado, es una conquista arrogante toda la canción “súbete a los excesos de este amor y tal vez veamos la revelación” , es una invitación a un amor alocado y tal vez fugaz, un amor del que te conformarás con lo que suceda y que Dios nos libre de engancharnos o pedir más.

Otra piel

Es una canción muy muy suave, perfecta para tomar una copa con tu acompañante o de fondo mientras le besas el cuello jeje, la letra hace una analogía entre el lenguaje y la piel que es otra manera de comunicarse, es una invitación a hablarse con mensajes de deseo, la voz de Cerati es extremadamente tenue y te acaricia y te hace flotar un poco en compañía de esas etéreas y melódicas guitarras y un bit de batería casi hipnótico.

Medium

Unas guitarras que te tensan y un bajeo que te pone en estado de alerta, es el inicio de este track, es la rola que más me recuerda a Soda, pero no al Soda que todos conocen sino a sus rolas más oscuras o experimentales, tiene un tinte existencial la letra, de estar o no estar, de caminar por la cuerda floja sabiendo caerás, quizá sea de las rolas que más desapercibidas pasarán en este disco, pero tiene algo que te hace reflexionar, al final ya no hay letra sólo un leve coro y guitarras que le suben la intensidad y te vuelan todo lo que traes en la cabeza o que te hizo reflexionar en las primeras estrofas, es una canción de este mundo tendiente al más allá, ¡increíblemente reflexiva!.

Bomba de tiempo

La canción más ponchada del disco, la letra es una advertencia, no de lo que te rodea sino de ti mismo, Cerati la entona sin mucha preocupación por la afinación, las guitarras tienden de repente a un funk muy apresurado, el ritmo del acorde te mueve aunque no lo quieras, es melódico pero fortísimo, cuando la rola parecía llegar a su fin explota en un caos perfectamente ensamblado hasta parece que estás escuchando una rola muy loca de The rapture, “caos” enmarcado perfecto en un “tragame tierra” (tragame sin acento, ya ven cómo hablan los ches).

Crimen

Después de que te recuperas del increíble final de Bomba de tiempo, llega Crimen que fue el primer sencillo de este disco, un piano muy caído, una emotiva interpretación de Cerati y aunque no estoy seguro creo que hay un bandoneón (muy leve pero sí se escucha), además posteriormente guitarras y un chelo hacen de Crimen la canción más conmovedora del disco, y una canción conmovedora de qué podría hablar sino del amor y la separación, al parecer se está conciente de que se fue el culpable de la separación y se busca solucionar esa angustia de saber que se perdió el amor (por ojetito o infiel o pendejo o celoso) ya sea recuperando a su amor o logrando de una vez por todas olvidar, al final un coro de huuuu!! huuuu!!, la hacen aún más emotiva y las guitarras eléctricas suben de tono olvidándose un poco del piano para finalmente terminar caída. No creo que sea la rola más emotiva de Cerati para eso tenemos Beautiful o Raíz (ambas en el disco Bocanada).

Jugo de luna

Si esta rola tuviera la tecnología que le metía Cerati en discos pasados sería como Paseo inmoral (viene en Bocanada), Jugo de luna tiene tendencias sexuales muy chidas, más que nada al sexo oral (¿¿¿o tengo problemas??? ¿¿¿Estoy enfermo a caso????), le mete un sintetizador que hace junto a las guitarras muy melódicas que la rola no decaiga ni en el final que es cuando más movida se pone, casi bailable. Yeah!, me late.

Bueno, trece cabalísticas rolas, destacaría el buen ensamble, buen sonido, la elegancia, la madurez interpretativa de Cerati y canciones no pretenciosas, simples , a veces, bueno no a veces, siempre lo más difícil es hacer lo más simple y Cerati lo hace en este disco, no creo que sea el mejor disco de Cerati, pero después de un rato sin disco de Cerati es un regreso genial que nos recuerda que está vigente y no sólo es escuchado por la generación que creció escuchándolo en Soda, Cerati tiene su propio público y su sonido y letras lo mantienen ajeno al tiempo, suena bien siempre y puede ser del gusto de cualquier persona de cualquier edad.

La mejor rola: Me quedó aquí (Lago en el cielo, Crimen y Adiós seguramente serán las que más te gusten)

La peor rola: Al fin sucede

Del 1 al 10: 8.5 (él sólo se puso la vara muy alta al crear Bocanada que es un discote)

Si nunca has escuchado a Cerati escucha una vez Siempre es hoy y después muchas veces Bocanada, dale un tiempo a Bocanada y te sorprenderá, de lo mejor en español de todos los tiempos, según yo jeje.

AndracA